Después de otra emocionante semana de acontecimientos médicos y políticos, los mercados accionarios han tenido uno de los noviembre más fuertes registrados (hasta ahora), con el S&P 500 subiendo un + 11%.
La volatilidad está en su nivel más bajo desde antes de la pandemia. Estas son señales bastante alcistas, y estamos de acuerdo con lo que indica el Mercado, hay fuertes razones para que los inversionistas que optan por acciones se mantengan optimistas.
La semana pasada, informamos que actualmente existen tres vacunas contra el coronavirus participando en la carrera para ser aprobadas. Pfizer (con el colaborador BioNTech) y Moderna pudieron mostrar tasas de eficacia del 95% en los ensayos de fase tres. La vacuna de Oxford y AstraZeneca no es tan efectiva (aunque sigue siendo más eficiente que la vacuna promedio contra la gripe), pero es más económica de producir y tiene el mayor número de pedidos por adelantado (3 mil millones). Además de las anteriores, hemos descubierto otras once vacunas en etapas avanzadas de desarrollo.
Desde cualquier perspectiva, esta es una fantástica noticia, ya que genera expectativas de una recuperación económica más sólida para el próximo año y los que vienen. Los bloqueos y la menor actividad del presente año, dan como resultado un importante número de consumidores en mercados desarrollados y emergentes con niveles de ahorro más altos. Lo que en otras palabras podemos denominar como demanda reprimida.
¿Qué indica la combinación de un retorno a la actividad normal, impulsado por las vacunas, junto a una demanda reprimida, y tasas de ahorro más altas?
De cara al 2021, podríamos ver un crecimiento económico mucho más fuerte de lo esperado... y esto es un buen augurio para los mercados accionarios.
Fuentes: Bloomberg, Yahoo Finance, Marketwatch, MSCI.
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